Los Mapuches y su visión de las estrellas
Las primeras observaciones del cielo nocturno en Chile
tienen su origen muchos siglos antes de la llegada de la astronomía moderna y
la instalación de sofisticados telescopios en nuestro territorio. Los Mapuches,
uno de los pueblos originarios de nuestro país, mantenían una importante
relación con el cosmos, además de su reconocido vínculo con su entorno y la
tierra. Ellos designaban el cielo bajo ideas homologables a los conceptos
astronómicos de constelación, planetas, galaxias, entre otros. Para ellos, los
astros guardaban un trascendental significado en el desarrollo de sus vidas. De
esta forma, “Wenuleufu” (Río de Arriba) correspondía a la Vía Láctea, a lo
largo de la cual, visualizaron una serie de elementos y animales que formaban
parte de su vida cotidiana. Destaca el “Luan” (Guanaco), representado por
un grupo de estrellas de la constelación
de Centauro. “Pünon Choyke” (Pisada de Ñandú), también conocida como “Melipal”,
correspondiente a la Cruz del Sur. Junto a ellas se ubicaba “Lükay” o
(Boleadoras) uno de las armas de caza más importante de este pueblo,
representada por las estrellas Alpha Centauri y Hadar de la constelación de
Centauro.
En el diccionario mapuche existe una frase, la cual es:
Lanantu y Lancuyen: literalmente, significa "muerte del
Sol" y "muerte de la Luna". La palabra es utilizada durante los
eclipses. Si el eclipse es de Sol, se anuncia la muerte de un cacique respetado
y querido. En cambio, si el eclipse es de Luna, la muerte es de un cacique
enemigo.
En el diccionario mapuche existe una frase, la cual es: